Ayer participé en el que ha sido hasta la fecha el triatlón más duro en el que he competido en muchos momentos pensé en la retirada pero finalmente acabé y conseguí no sólo mi objetico, clasificarme para el Campeonato de España de MD de Vitoria, sino que también me clasifiqué para el Campeonato de España de LD de Ibiza. Pero todo comenzó mucho antes...
Llegué a Buitrago a media mañana y aunque las previsiones decían que llovería hacía un tiempo espectacular aunque algo nublado. Tras dejar todo en boxes fuimos a nadar un poco y nos llevamos la agradable sorpresa de que el agua no estaba tan fría como la pintaban. Tras el paso por cámara de llamadas y la posterior colocación en el agua dan la salida.
Apenas se veían las boyas pero había tomado como referencia unos árboles juntos a la presa pero nada más comenzar a nadar me llevé un codazo en las gafas por lo que me las tuve que recolocar y se empañaron por lo que desde aquel momento no pude ver en ningún momento las boyas y básicamente me tenía que guíar por los gorros de la gente que llevaba por delante. Me torcí bastante y no me salió una natación buena acabando según la organización en 29'42'', tiempo muy mejorable.
La T1 fue muy larga pero enseguida estaba sobre la bici. Comencé los primeros kms de bici con calma sin saber que era lo que me iba a encontrar y con la intención de hacer la primera vuelta reservona para en la segunda, una vez ya conocido el trazado, poder apretar. En los útlimos kms de la primera vuelta el cielo se empezaba a poner bastante negro y calleron algunas gotitas pero no me podía imginar lo que nos iba a venir encima.
Hice el giro de 180º y comencé la segunda vuelta convencido a remontar pero nada más empezarla, hacia el km 40 comenzó a llover y cada vez estaba todo más negro no parecía que tuviera pinta de parar.
Fueron pasando los kms y cada vez llovía más y claro, cada vez llevaba más miedo en las bajadas a una posible caida. Llegó un momento en el que no llovía, granizaba!! Sentía como si me clavaran agujas en los brazos y tenía una sensación de soledad que acojonaba bastante. No se veía a nadie de la organización y los pobres que se había quedado tirados estaban en las cunetas poniéndose de agua hasta arriba y pasando un frío de muerte.
Cada vez pasaban más lentos los kms y parecía que no acaba nunca y claro, la cabeza se ponía a pensar y estaba totalmente convencido de que al llegar a boxes me retiraría porque tenía un frío brutal y tiritaba sin parar.
En los kms finales que eran de subida empecé a dar bastantes pedales con el objetivo de calentarme y empecé a hablar un poco con otro participante y creo que gracias a sus palabras se me quitó de la mente la idea de abandonar.
Tras 2h55' de bici a una media ridícula llegué a boxes, dejé la bici como puede y cual fue mi sorpresa cuando al intentar quitarme el casco no era capaz de desabrocharlo, tenía las manos tan frías que las tenía medio tontas! Pedí ayuda a un juez para que me lo quitara y después de ello me tuve que tirar al suelo para ser capaz de ponerme los calcetines y las zapatillas.
Tras el paso por la T2 salí corriendo como un rayo, sabía que había hecho una bici muy mala y llevaba a montones de diablillos por delante (Lola, Joseca, Ivan, Raul, Javi, Pablo...) pero poco a poco fui cogiendo a cada uno de ellos hasta conseguir acabar la carrera a pie, que se alargó casi hasta los 22 kms, en 1h31'27'', mi mejor tiempo en una media de un MD, a pesar de la lluvia, barro, cuestas, falta de avituallamientos...
Nada más cruzar la meta, me encontré con varios diablillos (Alex, Javi, Joseca...) y nos abrazamos como si hubieramos pasado seguramente el peor momento de nuestras vidas deportivas. Y así fue, lo pasamos muy mal pero esto lo recordaremos para siempre y nos servirá para cuando en el futuro volvamos a pasar momentos difiles porque
lo que no te puede te hace más fuerte.
Al final acabé en un tiempo de 4h59'06'' siendo el 7º de mi categoría, creo que 3º de Madrid, y clasificándome tanto para el Campeonato de España de MD de Vitoria (24-julio), al que asistiré, como para el de LD de Ibiza (30-octubre) al que casi con total seguridad no acudiré.
